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CAPITÁN MOSCÚ llega para darle voz al corazón del punk mestizo y solidario. Aquí la banda nos recuerda que el rock también puede (y debe) tener alma. Con este sencillo, la banda se ha encargado de fusionar sonidos del rock, el pop punk y matices de su estilo mestizo, para entregarnos una canción que no sólo es pegajosa y potente, sino que también eleva la esencia humana hasta el tope. Dedicada a los niños con parálisis cerebral, esta obra trasciende lo sonoro y se convierte en un acto de empatía y visibilidad... ¿Listo?
La canción no tarda en mostrarnos su esencia dinámica y diversa, en donde hay guitarras con distorsiones ligeras, ritmos enérgicos que nos recuerdan al punk clásico con vocalización que encuentra su lugar entre lo melancólico y combativo para hablar con claridad y respeto sobre una realidad que muchas veces ignoramos, lo que hará que creemos una conexión sincera con el oyente. Es una canción valiosa en medio de un panorama ruidoso.
