Lo que MBM nos ofrece con esta canción es una canción de
rock pop que toma ciertos elementos del rock melódico de inicios de los 2000. Se
trata de una canción cuyo ritmo se queda con nosotros aún después de que
terminó la canción, porque la tonada es amigable, pero no sencilla. En los
riffs de guitarra y en la batería pulsante, se puede sentir esta atmósfera
melancólica y, a la vez, brillante. Cabe destacar que en el minuto 1:20 tiene
un bajo que, además de brindar un poco de profundidad, marca la pauta de lo que
vamos a escuchar después.
La interpretación conserva un tono ligeramente grave, pero
también tiene este toque nostálgico que requiere la canción. Con este sencillo
la banda se acerca a un nuevo público, uno que disfruta de este tipo de rock
brillante, pero también apela a estas nuevas generaciones, pues la duración del
tema es el ideal, a penas 2:21 segundos, lo necesario para contar una historia
con una narrativa sonora que nos deja enganchados.
¡Un rock pop que viene dispuesto a conquistarte!

