Morcilla se ha vuelto una de esas canciones que desde el primer compás logran sacarte una sonrisa y te invitan a moverte. Rafa Tena, conocido por su trabajo dentro del pop rock en español, se atrevió aquí con una fusión explosiva al unirse con Las Negris, artistas gitanas que aportan dinamismo, ritmo, fuerza y felicidad a una propuesta que desborda frescura.
La canción revuelve con soltura y energía tangos, flamencos y guaguancó cubano, logrando así un puente sonoro entre España y Cuba. La producción es bailable, colorida y totalmente contagiosa, además con una letra que celebra aquellos caminos de ida y vuelta entre dos culturas hermanas, como el flamenco y el Caribe, la tradición y el descaro.
Esta pieza se aleja del pop predecible, y esta colaboración es una brisa de aire fresco. Es una composición alegre, desenfadada e ideal para levantar cualquier momento y lugar. Tena y Las Negris nos recuerdan que es importante jugar con los sonidos, celebrándolos y mezclándolos. Prepárate para dar todo en el baile.
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